ACCIDENTOLOGÍA DEL MOTORIZADO, PROBLEMA DE SALUD PÚBLICA
Por Eric Omaña
Introducción
Dos
gobernadores, uno del estado La Guayra y otro del estado Anzoátegui, han
decidido tomar acciones ante el desangramiento que viene constituyendo el uso
inapropiado de las motos por miles de sus usuarios, en todo el territorio
nacional.
El gobernador
de La Guayra ha señalado en los medios de comunicación que, los hospitales del
estado están repletos de personas que se han accidentado con motos, unas por
ser sus usuarias y otras, peatones que nada tienen que ver con motos, que es lo
más indignante. Pero ha dado cifras, lo cual es muy importante y motivó esta
nota, ya que se ha vuelto costumbre en nuestro país que, los organismos que
deben dar cifras no las socializan, eso está pasando con el Boletín del
Ministerio de Salud que aparecen de vez en cuando, y que decir de la data del
INPSASEL que, ya lleva once (11) años sin aparecer.
Indica este
funcionario una cifra más que alarmante, solo entre enero y lo que va de
febrero de este año 2025, es decir, en menos de dos meses, han ingresado a los
hospitales del estado 246 personas producto de accidentes de tránsito con
motos, siendo el detonante el caso reciente de un motorizado que, haciendo
piruetas en la moto denominadas “caballito” atropelló a 4 niños en la Av.
Soublette, una de esas víctimas tuvo que ser tratada en terapia intensiva.
Uno puede
teorizar que, si eso pasa en un estado pequeño como La Guayra, a nivel nacional,
usando ese valor como si fuera constante para los demás estados, que no lo es
porque no tengo base científica, solo estoy especulando, la cifra total para
estos dos primeros meses del año, pudiera rondar los 5.000 pacientes.
El gobernador
de La Guayra no da cifra de fallecidos,
hay que inferirla a partir de lo que ocurre en otros países, pero si es
enfático en hacerse la autocrítica de que la gran ocurrencia de accidentes con
y por las motos tiene mucho que ver con la flexibilidad de las autoridades policiales,
que permiten el desplazamientos sin cascos, con niños, con bolsas, en dirección
opuesta, como decimos, “comiéndose” la flecha, etc. Además, que se reconoce que
muchos motorizados violan las elementales normas de conducción de este tipo de
máquinas por impericia, imprudencia y hasta por desconocimiento de la normativa
que rige la materia.
Un dato
interesante que aporta el Gobernador de La Guayra, Lic. José Alejandro Terán es
el costo de un motorizado hospitalizado que ronda en promedio los 3.000 dólares,
mucho, pero muchísimo más de lo que cuesta la moto con la cual tuvo el
accidente.
La historia
de la moto
Estadounidenses
y europeos compiten en cuanto a ser los creadores de las motos. En EE.UU.
Sylvester Howard Roper construyó un velocípedo a vapor, en la ciudad de Boston,
desarrollado entre 1867 y 1869. En 1868, en Europa hicieron otro tanto, pero la
primera moto como las conocemos actualmente data de 1885 cuando Wilhelm Maybach
y Gottlieb Daimler en Alemania, fabricaron un modelo con motor de combustión
interna, luego de separarse de la empresa del inventor Otto.
Esas
primeras motos tenían ruedas laterales, ubicadas en la rueda trasera, como hoy
en día llevan las bicicletas de los niños que están en la etapa de aprender a
montarlas. Actualmente en China y en Japón circulan motos con esta aplicación,
bueno en muchos países sucede eso, sólo que en este caso, las ruedas auxiliares
se recogen mientras el vehículo está en marcha, y salen cuando la moto va a
baja velocidad, o se detiene, para facilitar que el usuario no tenga que estar
haciendo maniobras con su cuerpo, estirándose para llegar al piso.
Volviendo a
la historia, luego de este inciso, el señor Daimler creó la “Reitwagen”,
que en alemán se traduce como el “vagon montable” aprovechando el recién creado
motor de combustión de Otto, máquina que se convirtió en el despliegue de este
tipo de vehículos en el mundo occidental, porque en el mundo oriental, hasta
hace pocas décadas lo que predominaba era la bicicleta, hasta que en China, los
empresarios empezaron a construir motos e inundaron al mundo con las mismas,
por sus bajos costos, peso y alta calidad.
Una
creación interesante fue la motoneta, que permite al usuario tener una postura
más cómoda y no ir a horcajadas, ya que cuentan con una plataforma para los pies
en la que el conductor se apoya, fue construida por primera vez en 1902 por un
francés, el señor Georges Gauthier.
Para
el año de 1910 se agregó un componente lateral a la moto, el sidecar, que la
convirtió en una unidad de tres ruedas, en Venezuela fueron famosas con las
motos de panaderos, por ser estas profesiones los que más las usaron.
Accidentes
con motos en otros países.
Usando
el Anuario estadístico de accidentes del año 2023, emanado de la Dirección
General del Tránsito del Reino de España, se tiene qué en ese país, en vías
tanto inter-urbanas como urbanas, fallecieron 485 usuarios de motos y
ciclomotores, y fueron hospitalizados 3.478 personas. Los motoristas en España
constituyen el 3% del volumen del tráfico, y pese a que las autoridades
observan que ha disminuido el número general de los accidentes de tránsito, en
el caso de los motoristas este número va en ascenso, elevándose la tasa de
fallecidos en un 37% para el 2024 con relación a años anteriores.
Con
esta data me atrevo a plantear otra aventura estadística que no tiene soporte
científico, pero sirve para hacer conjeturas. Veamos. España tiene 48 millones
de habitantes, y fallecen casi 500 usuarios de motos y van a hospitalización
3.500. Bueno nosotros somos 28 millones, 20 millones menos que en ese Reino.
Uno esperaría que las datas de los conductores fallecidos y hospitalizados por
accidentes con motos fuera alga más de la mitad que en ese país, respectivamente
pudiera ser 250 y 1.800 respectivamente, pero como no hay data oficial para
comparar solo queda unirse a la elucubración que hice arriba, y que no me
execren los epidemiólogos por hacer una conjetura sobre otra conjetura, pero
nosotros podemos tener una cifra de hospitalizados de motoristas accidentados
del orden 5.000, cifra que supera con creces a la española.
Lo anterior
nos puede llevar a la data de fallecidos, que debe ser mucho, pero mucho más,
la cual pudiera estar sobre los 800 anuales, si usamos la relación 1:6 que se
aprecia entre el número de fallecidos y el número de hospitalizados en el caso
español.
En lo
que sí conseguiré indulgencias con los epidemiólogos es que en los temas
macros, aunque no se tenga el estudio científico de las causas, el problema
puede ser atacado porque son verdades universales, eso nos lo enseño Jhon Snow
(Celda & Valdivia, 2007), quien sin conocer que cosa “morbosa” causaba la
mortandad por cólera en la ciudad de Londres en el siglo XIX, ideo las acciones
de prevención, de la cual surgió una de las primeras normas sanitarias
conocidas, aquella que indica que los conductos que llevan agua para el consumo
humano, siempre deben estar por arriba de los conductos que llevan las aguas
servidas.
En el
caso de Estados Unidos, según el sitio web Pacific West Injury Law, se reporta
que las motocicletas constituyen aproximadamente el 3% de los vehículos registrados
en ese país, pero en el año 2020, representaron el 4% de todas las lesiones de
los ocupantes, el 18% de todas las muertes de los ocupantes y el 14% de todas
las muertes en accidentes de tráfico, estimándose que las muertes entre
conductores y pasajeros aumentaron un 11% con respecto al año anterior.
En
ese año 2020 se registró el record de más de 182.000 casos lesiones por accidentes
de motocicleta a lo que se debe agregar la cifra de 5.500 fatalidades entre los
motoristas estadounidenses.
Haciendo
otra vez el ejercicio elucubrador anterior, se tiene que la relación
fallecido-heridos es de 1:35 (una fatalidad, 35 heridos). Si aplicáramos esa
relación a la data estimada en Venezuela, allá arriba, se pudiera tener que,
para los 5.000 casos estimados de motorizados heridos, la cifra de fallecidos
es de 150 casos. Mucho menor al compararnos con los españoles, el tema es que
acá entran tantos factores, porque la cosa es multicausal, multifactorial y
todas las multiplicidades que nos podamos imaginar, ingresan variables como la
calidad de atención de emergencia en el país nórdico comparado con Venezuela.
Cerremos
este intento de comparaciones con Argentina, que tiene una población similar
que España, por lo cual, la comparación luce más aceptable que con la anterior
de EE.UU.
Según
los datos preliminares difundidos en un informe de la Dirección de Observatorio
Vial, Estadísticas y Registro de Datos de la Agencia Nacional de Tránsito y
Seguridad Vial (ANTSV) de Argentina citado por el medio digital Tiempo
Argentino (2025), 4.369 personas murieron en el año 2023 durante un total 3.642
siniestros viales en todo el territorio nacional. Los usuarios de motos
fallecidos fueron 1.736 en todo ese país sureño.
Acá no tenemos data para obtener una relación de las personas que han sobrevivido a un accidente de tránsito con motos, pero veamos, España y Argentina tienen una población numéricamente similar, pero las fatalidades de España fueron casi 500 y las de Argentina la triplican, sin duda en Venezuela, nuestros compatriotas motorizados fallecen cada año en una cantidad de debe estar en ese rango, es decir, entre 500 y 1.700 casos.
No
habiendo data en Venezuela disponible, recurrimos a la web, un tal “Observatorio
de Seguridad Vial” informó, sin citar de donde se hizo con esta data, de los accidentes ocurridos en 2024, cuando según ese portal se registraron 1.373 fallecidos en más
de 3.000 accidentes de tránsito ocurridos en Venezuela. El reporte señala que
las motocicletas constituyen el tipo de vehículo más involucrado en estos
siniestros debido, principalmente, a exceso de velocidad, impericia de los
conductores, fallas mecánicas, consumo de alcohol y mal estado de la vialidad.
Esta instancia no aclara cuántos de esos accidentes son en motos.
Conclusiones
Es hora que todas
las gobernaciones y alcaldía se enserien con este problema de salud pública que
nos está acabando con muchas vidas jóvenes e infantiles, y eso se logra con educación
y la promoción de una cultura de seguridad, donde el INPSASEL tiene mucho que
ver, pues ha dejado a la deriva que el país, como otros países de la región,
tenga un Día de la Seguridad, y acabar
con la flexibilización de los cuerpos de seguridad del Estado en esta materia,
superar esa absurda represión al motorizado con las alcabalas en todas partes
que en nada contribuyen a la solución de este problema.
Un ejemplo del corte de la flexibilización a la que se llegó en el tema motorizados, lo marcó el Fiscal General de la República luego que se hizo viral un video de un señor que puso a conducir la moto a un niño que puede estar alrededor de los 7 años en una autopista de la ciudad capital, agravado el caso porque le acompañaba de parrillera una dama, se presume que ambos son el padre y la madre del niño. Gracias al video, la pareja fue detenida y puesta a la orden de los entes de administración de justicia del Estado. La foto que uso en este artículo es de ese caso, judicializado a principios de este año, 2025.
Y sin duda
alguna, es hora que se emitan los boletines epidemiológicos, tanto del
Ministerio del Poder Popular para la Salud como del Instituto Nacional de
Prevención, Salud y Seguridad Laborales, mi deseo es que no estén esperando que
el Presidente Maduro les de la instrucción de algo que deberían estar haciendo.
Referencias
Cerda
L, Jaime, & Valdivia C, Gonzalo. (2007). John Snow, la epidemia de cólera y
el nacimiento de la epidemiología moderna. Revista chilena de infectología,
24(4), 331-334. https://dx.doi.org/10.4067/S0716-10182007000400014
Ministerio
del Interior. Dirección General del Tránsito del Reino de España (2023).
Disponible en https://www.dgt.es/export/sites/web-DGT/.galleries/downloads/dgt-en-cifras/publicaciones/Anuario-Estadistico-de-Accidentes/Anuario-Accidentes-2023.pdf
Figueroa, G. (2025). Radiografía de los siniestros
viales en Argentina: murieron 4369 personas en 2023, la mayoría motociclistas y
la mitad en rutas. Web Tiempo Argentino. Disponible en https://www.tiempoar.com.ar/ta_article/murieron-4-369-personas-en-siniestros-viales-durante-2023/
Una gran verdad, aunque no hay justificación razonable para no disponer de cifras, se deben tomar medidas integrales sobre esta tragedia motorizada para mermar está terrible situación. Y para eso, existen instituciones con esa responsabilidad. No todo es Miraflores. J.
ResponderBorrarDesde mi dramática experiencia puedo afirmar que debido al caos producido por los motorizados en las autopistas y calles capitalinas, quiero dejar de conducir. Sin temor a exagerar, la presencia de motorizados y sus niveles de violencia y agresión, el altísimo riesgo de siniestralidad, me da unos nervios espantosos, han producido una especie de terror, de fobia y rechazo colectivo, dan miedo y rabia al mismo tiempo, no hay ley, no hay vigilancia, ni sanción, ni uniforme que respeten... Cada día lo pienso más antes de salir a la calle. El ruido de sus motocicletas, su violencia grupal da terror
ResponderBorrarEsperemos que esto sirva de ejemplo para que mucho de los motorizados y tomen conciencia de que conducir este tipo de vehículos no es un juego, y menos para hacer lo acontecido en este caso, lo mas preocupante es que aún en las redes siguen pasando videos como este, donde de forma inconsciente colocan a niños menores de edad a conducir estos vehículos, aunque son de otros países pero la imprudencia no tiene limites para algunos, saludos estimados.
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